Carencias en hospitales provocan más muertes

CITAN LA FALTA DE SUMINISTROS Y LAS DEBILIDADES EN FORMACIÓN DE PERSONAL

Doris Pantaleón
Santo Domingo

La falta de apego a protocolos básicos de bioseguridad, como usar guantes, lavarse las manos y de conciencia sobre el riesgo de infección conlleva al incremento del surgimiento de bacterias causantes de muertes en neonatos en hospitales, esto unido a otras debilidades que abarcan la sobrecarga, falta de personal especializado, de insumos, equipos, mantenimiento y vigilancia.

Así lo detalla Teresa Narváez en una entrevista con Listín Diario. Ella es la directora de Project HOPE, una entidad norteamericana que desarrolla desde hace 22 años programas en el país, muchos de ellos dirigidos a la atención materno infantil, lo que le ha permitido realizar una evaluación de las debilidades y las fortalezas que tiene el país en esta materia.

Ve las debilidades en diferentes elementos como la poca dotación de suministros médicos; limitación de los recursos profesionales especializados; falta de formación de enfermeras especializadas en obstetricia, neonatología y pediatría como tienen otros países; lograr un cambio general de actitud en el personal; debilidades en el mantenimiento de equipos y que el médico residente no esté acompañado de profesores durante los servicios.

Dijo que esas, entre otras causas, explican las razones por las cuales República Dominicana es uno de los 11 países de la región con mayor tasa de mortalidad materna e infantil, a pesar de que tiene fortalezas tangibles como la accesibilidad geográfica a todas sus comunidades y una gran infraestructura de salud con establecimientos de acceso a toda la población.

A esto se suma -planteó- que 97 por ciento de las embarazadas recibe chequeo prenatal y casi 99% de los partos es en establecimientos de salud atendidos por un profesional, lo cual no es concordante con la alta mortalidad, porque hay otros países de la región que por falta de accesibilidad geográfica, la atención prenatal no llega a 60% de las embarazadas, sin embargo, su tasa de mortalidad es menor.

Profesionalización
“Aunque está el recurso humano nos hemos dado cuenta que el nivel académico, profesional o técnico es pobre. El problema se evidencia en las muertes materna y neonatales, pero el problema viene de más tiempo atrás y es en la formación cada vez más débil de los profesionales de la salud, no solo en la formación técnica, sino en formarlo acorde a las necesidades”, dijo.

Recordó que los avances científicos en materia de salud van cada día en crecimiento, pero la formación académica profesional está cada vez más rezagada, lo cual se resolvería si las universidades empiezan ya a formar médicos y enfermeras especialistas, porque se habla de mortalidad materna e infantil desde hace muchos años.

Señaló que también se necesita trabajar en el cambio de actitud en el personal de salud porque si no se trabaja en ese rumbo, no se lograrán las transformaciones, aunque el hospital sea nuevo y bien equipado.

Entiende que es de las fortalezas de donde hay que partir para lograr el cambio, y puso como ejemplo que a su llegada al hospital San Lorenzo, de Los Mina, donde se desarrollan programas de reducción de mortalidad materna e infantil, encontraron en el 2015 alta mortalidad y muchas necesidades en todos los aspectos, y que la única fortaleza que encontraron fue buena actitud de la mayoría del personal y que de ahí partieron.

TRABAJO DEL PROYECTO HOPE EN 3O PAÍSES
Explicó que Project HOPE es una ONG internacional que desarrolla labor en 30 países y su trabajo se enfoca dependiendo del perfil epidemiológico de cada nación.

Uno de sus pilares es la salud materna infantil global, por lo que al República Dominicana estar dentro de los 11 países con más alta tasa de mortalidad infantil y materna en la región, hace que se convierta en su prioridad al igual como lo es para el Ministerio de Salud.

Desarrollan un programa modelo de salud en el primer nivel de atención con tres Centros de Atención Primaria Especializados con énfasis en cercanía a la comunidad, logrando una integración entre comunidad y establecimiento, con una atención integral. Inició con una clínica en el 1996 en el sector de Herrera, y ha sido replicado en Monte Plata y Haina.

Los pacientes se atienden en el centro y son seguidos a la comunidad, además que involucra a las personas en el cuidado de su salud.

Listin Diario.