Por: Robert Cabrera
robertpcabrera@hotmail.com
15 de abril del 2020.- "A confesión de parte, relevo de pruebas", es una máxima del derecho común que se refiere a que cuando alguien se incrimina, su declaración puede ser utilizada como prueba en un proceso judicial.
En varias ocasiones, hemos escuchado de voz de los jóvenes detenidos por faltar el respeto a la autoridad policial, que al momento de grabar los videos insultantes, lo han hecho por que "se fumaron un tabaquito" o que "estaban arrebatao", lo que los inculpa como consumidores de drogas o sustancias prohibidas.
Sin embargo, estos muchachos piden una disculpa pública a la Policía, son puestos a barrer o brincar como sapos y al día siguiente son despachados a sus casas.
Como no ha habido consecuencias en ese sentido, uno colige que en el país está legalizado el consumo de estupefacientes, enviando un mensaje negativo a las nuevas generaciones, que entenderán que pueden drogarse, admitirlo frente a las autoridades competentes y no pasa nada.
El director de la Policía Nacional, General Ney Aldrin Bautista, emitió unas declaraciones enérgicas, acerca del endurecimiento del trato que debe darse a los que insultan a los miembros de la institución.
Entonces, ¿por qué no se comienza con someter a la acción de la justicia a los confesos consumidores de drogas?
Dígame, señor director, ¿es un fallo de las autoridades bajo su mando o es que no me he enterado de que en República Dominicana, el uso de drogas está legalizado?
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