Un mural para Anthony Ríos.

 

Por: Robert Cabrera

robertpcabrera@hotmail.com

Santiago; R.D.- 13 de marzo de 2021.- En un momento en el que el alcalde de Santiago Abel Martínez, ha llenado la ciudad de murales en homenaje a los artistas dominicanos más destacados y personalidades que por su trayectoria son merecedores de ser recordados y plasmados en las paredes de la histórica ciudad, extrañamos a uno de los más grandes artistas, ido a destiempo.

Nos referimos al inmenso Florián Antonio Jiménez Rodríguez, conocido por todos como Anthony Ríos, nativo de Las Cañitas, Sabana de la Mar, Hato Mayor, pero Santiaguero confeso.

Marginado por los organizadores de las más importantes premiaciones nacionales, este artista, nos llenó de orgullo, siendo no solo un exitoso autor de letras, interpretadas por artistas locales e internacionales y en su propia voz, sino que fue capaz de destacarse en la locución, la comedia, la actuación y sobre todo por ser un hombre que a pesar de su grandeza, era amigo de todos.

Para Anthony, Santiago era su segundo pueblo y siempre decía que de no haber nacido en Hato Mayor, le habría gustado ser de Santiago.

A parte de Santo Domingo, donde hay una intensa vida nocturna, la ciudad corazón fue su plaza más importante, presentándose aquí con frecuencia, siempre a casa llena, sin importar el escenario.

Y es que Anthony Ríos cultivó grandes amistades en esta región del país y conocía a todos por su nombre y les dispensaba afectos y un trato especial durante sus encuentros.

Con más de trescientas composiciones y doscientos discos grabados, en honor a la justicia ante el ídolo discriminado, la alcaldía de Santiago, a dos años de su partida al cielo, debe reivindicar a este monstruo del arte, patriota y amigo con un mural en homenaje suyo.